martes, 17 de marzo de 2009

Hurt

Hay que reconocerle al inglés que es un idioma que ha tenido el buen tino de reducir sólo a una sílaba las cosas que importan, incluso la palabra importar (care); mientras en el castellano peleamos con las "r" de "perro" (dog), el diptongo de "muerte" (death) o el tiempo que se pierde en las estructuras bisilábicas de "vivir" (live) o "hacer" (do) o en la innecesaria longitud de la palabra amor (love), todos esos conceptos en inglés se reducen a un suspiro o un gruñido claro e inconfundible. Un buen ejemplo es el verbo/sustantivo hurt, una palabra breve y que suena de por sí como un quejido de dolor, pero no uno pasajero sino algo que vino para quedarse. Mientras nosotros dribleamos entre la decisión de si optar por "lastimado", "herido" o "dolorido", el hurt inglés resume todo y adquiere una cualidad casi ontológica. Hurt no es un estado en el que nos encontramos sino más bien algo que somos, algo que no sabemos si tiene reparación.

Hace unos días estaba en la puerta de un pub en un extraño estado anímico; acababa de volver de un homenaje a alguien que conocí y que ahora está muerto, Eduardo Darnauchans, y, tal vez por nervios, tal vez por cosas que ese homenaje removió, estaba en un estado hipersensible, con una clase de melancolía que casi tenía olvidada. Descolocado. De pronto escuché que desde el equipo de audio del pub que estaba al lado -y que es parte del mismo en el que me encontraba, pero con música independiente- salía la voz inconfundible de Johnny Cash encima de una melodía hipnótica y con un curioso arreglo de piano. No conocía el tema, así que pregunté qué era y me dijeron que era el cover de 'Hurt' de Nine Inch Nails.

Luego me enteraría que la versión es muy conocida, que su monumental video-clip ganó cuanto premio se puede ganar, y que el tema terminó convirtiéndose no sólo en el último sino en uno de los mayores éxitos de toda la carrera de Cash, siendo uno de esos temas que son familiares hasta para quienes no tienen la menor idea de quién era the man in black. Pero yo no había escuchado en forma íntegra el American IV que lo incluye, y en los tiempos en que su video-clip estaba en rotación intensiva no tenía cable y -al igual que ahora- ignoraba lo que pasaba en MTV. Y por sobre todas las cosas, yo odiaba a Nine Inch Nails. Pero esta no es una canción de Nine Inch Nails.

I hurt myself today
To see if I still feel
I focus on the pain
The only thing that's real
The needle tears a hold
The old familiar sting
Try to kill it all away
But I remember everything

What have I become
My sweetest friend
Everyone I know goes away
In the end
And you could have it all
My empire of dirt
I will let you down
I will make you hurt


I wear this crown of thorns
Upon my liar's chair
Full of broken thoughts
I cannot repair
Beneath the stains of time
The feelings disappear
You are someone else
I am still right here

What have I become
My sweetest friend
Everyone I know goes away
In the end
And you could have it all
My empire of dirt
I will let you down
I will make you hurt

If I could start again
A million miles away
I would keep myself
I would find a way


Hace ya muchos años, cuando recién empezaba a experimentar con el bajado de canciones de la web -los tiempos de Audiogalaxy- decidí bajarme un tema (en aquellos tiempos los temas se bajaban de a uno) de Bonnie Prince Billy (Will Oldham) del que había escuchado hablar muy bien. La primer versión que encontré era la de Johnny Cash, y apenas terminó de bajar decidí escucharla para ver de qué merecía tanto entusiasmo y alabanzas. El efecto fue, casi literalmente, físico: luego de escuchar las raras progesiones de acordes de 'I See a Darkness' -y de entender de punta a punta su letra en la cristalina dicción de Cash- me quedé helado junto a la computadora un buen rato. Al llegar a la treintena había llegado a considerar que uno podía admirar, emocionarse limitadamente y apreciar estructuralmente -o en su interpretación- cualquier canción, pero que la relación que uno mantenía con ellas se debilitaba ante la evidencia de lo que son: canciones, no verdades reveladas, no mensajes de iluminación.

Sin embargo 'I See a Darkness' movió -como lo hace una sesión de masaje o de pesas cuando hace tiempo que no nos ejercitamos- partes mías que ya había olvidado que estaban ahí. Y no eran malas partes, eran cosas que tal vez dificultaran el vivir más de lo que lo ayudaban, pero que estaban mucho más cerca de lo que podemos considerar como el auténtico yo que la persona que mandamos a trabajar todos los días. 'I See a Darkness' -canción que hoy en día es considerada por casi todo el mundo como un hito de los 90- demostraba en menos de cinco minutos que la música moderna heredera del rock no era exclusivamente un privilegio emotivo de los menores de 30, y que había una forma digna de expresar las incertidumbres tardías, las que ni siquiera sabíamos que iban a estar allí al llegar.

Pero esa era una canción tremenda que, más allá de la interpretación de Cash, se sostenía por sí sola como un tema de inesperada importancia, lleno de preguntas cruciales y estructurado con maestría. Yo tenía mis dudas con respecto a estos discos tardíos de Cash; el hombre de negro nunca había sido -a pesar de lo carismático que me resultaba su presencia- un ídolo para mí de la forma en que lo habían sido Bob Dylan, Neil Young o Richard Thompson. Lo consideraba un gran intérprete, similar a nuestro propio hombre de negro, Alfredo Zitarrosa, pero sin la esencia crucial de este mismo. Recuerdo pasármela provocando extranjeros que notaban la similitud entre Zitarrosa y Cash -ambas figuras insulares y sombrías en el panorama del folclore de estos países-, asegurando que el autor de 'Guitarra Negra' era ampliamente superior al de 'Ring of Fire'. En muchos aspectos lo sigo creyendo así, pero Zitarrosa siempre se propuso en sus canciones como un romántico, un hombre moral, incluso un hombre nuevo, tal vez un triste. Cash en cambio prefirió abrazar una imagen un poco más triunfalista e indiferente, pero también la de alguien que se hace cargo de su propia inhumanidad. "I shot a man in Reno just to watch him die" es posiblemente una de las líneas más poderosas de la historia de la música popular contemporánea, pero no debe ser interpretada bajo la luz de la fanfarronería criminal -y generalmente imaginaria- del gangsta rap ni bajo la pesadumbre de consciencia del acto irresponsable. No, Cash cuenta un acto injustificable y define lo superfluo de sus motivos. No hay pedido de disculpas pero la exactitud de la descripción y la ausencia de excusas demuestran una suerte de valoración -de valoración negativa- de su acción.

El narrador de "Folsom Prision Blues" mató a un tipo porque sí, como Meursault, pero no le falta el respeto al muerto tratando de encontrar elementos que expliquen o hagan comprensible su acción. No lo insulta suponiendo que su arrepentimiento podría hacer más liviana su acción. Algo realmente raro de encontrar en canción. Pero 'Hurt', en cambio, es una canción de arrepentimiento, y es una canción entonada por un hombre próximo a la muerte pero que canta para los vivos.

Indudablemente la serie American Recordings fue una tremenda idea de Rick Rubin; como se sabe el productor fue llamado para modernizar y relanzar la carrera de un Johnny Cash ya envejecido, con problemas de salud y fuera del radar de la prensa cool, y el sistema elegido por Rubin fue perfecto: por un lado redujo al mínimo la orquestación alrededor de la cascada -pero aún conmovedoramente expresiva- voz de Cash, hasta que el resultado sonoro fue similar al de los cantautores indie que florecían fuera de los grandes medios de difusión, y manejó ese minimalismo arreglístico con un gusto exquisito. También aproximó a una buena serie de músicos jóvenes y notorios, extáticos ante la posibilidad de cantar a dúo con Cash, y le eligió un buen número de canciones recientes, muchas de ellas provenientes de bandas y estilos alejadísimos del mundo del country, que funcionaron como gancho para llamar la atención de muchos que se aproximaron a estas grabaciones casi por morbo, para ver cómo el viejo oscuro se desenvolvía con un tema de Soundgarden o de U2.

Aunque los resultados de estas versiones fueron muchas veces brillantes, lo cierto es que otras tantas sólo fueron buenas ideas en lo conceptual, y las versiones de temas como 'Rowboat' de Beck o 'Personal Jesus' de Depeche Mode resultaron ser inadecuadísimas y tan distantes al lenguaje propio del músico como las versiones de Charly García hechas por Mercedes Sosa. Otras veces aunque la canción pareciera venirle como un guante, la interpretación de Cash no estaba a la altura, como en el caso del 'All My Life' de los Beatles o el 'Bridge Over Troubled Waters' de Paul Simon a las que, a pesar de los excelentes arreglos, la voz no llega a darle la vida que uno se imaginaría a priori.

Pero están las otras, las que sí embocó y que en muchos casos convirtió en versiones definitivas. 'One' de U2, 'Hung my Head' de Sting, la ya mencionada 'I See a Darkness' de Will Oldham, 'I'm a Drifter' de Dolly Parton, la tradicional 'Sam Hall', todas ellas alcanzando cumbres de emotividad superiores a las de sus versiones originales y, en muchos casos -particularmente los temas con connotaciones religiosas o violentas- resignificados con autoridad. Sin embargo y por brillantes que sean estas versiones, hay que reconocer que eran todas excelentes canciones ('One' es de esos temas que hasta los detractores de Bono & cía reconocemos a disgusto que es una canción enorme) y que el mérito es compartido entre autores e intérprete. Pero en el caso de la mejor de todas las versiones contenidas en los numerosos American recordings -'Hurt'- el caso es muy distinto. Porque, disculpenme los fans de NIN -si los hay leyendo esto-, la versión original es una porquería y ni siquiera es una canción bien compuesta.

Nine Inch Nails o Trent Reznor debe ser la banda o proyecto que resume mejor lo peor del rock industrial y el acercamiento al lado oscuro de lo humano que parece ser el gran atractivo del género. Sin mencionar siquiera a la primera y genial generación industrial (Throbbing Gristle, SPK, Skinny Puppy), gente que realmente trabajaba con material expresivo peligroso y novedoso, lo de Reznor es realmente malo incluso en comparación con industriales semi-domesticados como Ministry o Marylin Manson. En esos casos, por de pronto, todavía hay rastros de humor negro, violencia real y grandeza sonora, pero el aporte de Reznor -amigo/enemigo de estas bandas- fue el de introducir la autocompasión depresiva y adolescente del mundo indie a un género que tal vez se reivindicaba por su propia soberbia e inhumanidad. Indudablemente Reznor es un gran manipulador de timbres y un buen programador de bases, pero como cantante y compositor es un llorón pomposo que maneja cuanto cliché se pueda tolerar de la imaginería romántica del dolor emocional.

Provocador moderado y maldito profesional, Reznor ha publicado una serie de discos que en ocasiones sorprenden por sus fuegos de artificio sónicos, pero que nadie mayor de 16 años puede tomarse muy en serio. 'Hurt', la canción en cuestión, cerraba su segundo disco -The Downward Spiral- y fue saludada en su momento como una señal de madurez compositiva y anímica por quienes querían ver a toda costa la transformación de Reznor de gusano de moda a compositor laureado. Pero por desgracia el tema sólo puede ser considerado como bueno o sensible en el contexto de las otras canciones de NIN. Construido sobre un arpegio más bien infantil de Am-C-D, sobre el que Reznor susurra/lloriquea los primeros versos, pasa a un estribillo más bien cuadrado en el que Reznor sube una octava su lamento y que en su segunda vuelta introduce un bombo en negras más bien bruto (aunque de timbre interesante) que le da un poco de énfasis. Luego de dos estrofas, el tema culmina con una grandilocuente e hiperdistorsionada guitarra sintetizada que arruina la poca sutileza que podía quedarle a la canción.

La letra, que reproduje arriba, no es mucho mejor, no tanto por estar mal escrita sino sobre todo por la acumulación de lugares comunes de la mirada auto-lesiva. Arranca con una clásica referencia junkie y luego abruma con una flagelación grandilocuente, llena de imperios, coronas y tronos que vaya uno a saber quién le otorgó a Reznor. Y como si fuera poco tiene una concepción temporal que la convierte en una canción totalmente increíble viniendo de un veinteañero tardío. No es que el paso del tiempo no pueda ser tema para alguien que no cumplió los treinta, de hecho es una preocupación muy normal en la lírica del rock y ha dado frutos tan perfectos como 'My Back Pages' de Bob Dylan, '1969' de The Stooges, 'Heart of Gold' de Neil Young, 'Thunder Road' de Bruce Springsteen o 'Sixteen' de The Buzzcocks. Pero en estas canciones -todas de plumas más hábiles que la de Reznor, hay que reconocer- la sensación de vejez o de nostalgia precoz está expresada en términos relativos, en relación a la pérdida de un pasado inmediato o a la consciencia a futuro de la velocidad del tiempo. Reznor en cambio habla como si fuera un vampiro puto que se escapó de un libro de Anne Rice, como si ya hubiera vivido 100 años y tuviera todos los casilleros existenciales llenos. Fuck him and the horse he rode on.

Quién sabe, capaz que es un tipo muy precoz y es así, pero se me ocurre que si así fuera escribiría y compondría mejor que la pobre imitación digitalizada de Kurt Cobain que ofrece. Pero lo que la hace realmente inadecuada para un cantante joven es su fatalismo, lo inalterable de lo descripto, la gran mentira depresiva. Lo definitivo.

Entonces, ¿cómo una obra tan pobre como la que acabo de describir puede convertirse en la canción que más me ha estremecido en años? En realidad sería un tema de tésis interesante para especular desde la lingüística sobre las connotaciones agregadas por el emisor o desde la teoría del arte en relación al aura transmitida por el mismo, pero teniendo en cuenta que se trata de una canción posiblemente lo mejor sea comenzar por la música. Evidentemente la versión de 'Hurt' incluida en el American IV: The Man Comes Around (2002) es una idea de Rick Rubin; no hay forma que uno pueda imaginarse a Johnny Cash escogiendo por sí mismo un disco de NIN y escuchándolo de principio a fin sin pegarle un tiro al equipo de música.

Y me gustaría pensar que directamente le hizo escuchar al viejo el arreglo que grabaron para el disco sin tener necesidad de confrontar la versión original. Un arreglo tan sencillo como genial; Rubin eliminó la estúpida guitarra distorsionada final y mantuvo la guitarra mínima del comienzo, apenas armonizada por un par de tonos sostenidos -mezclados muy atrás- de lo que parece ser una guitarra eléctrica pero que puede ser cualquier cosa, pero al llegar al estribillo no sólo no la electrificó sino que sustituyó el bombo por un piano en ostinato que apoya los cambios de acorde sobre las negras y que produce una sensación de intensidad en aumento sin que ni el volumen ni la instrumentación realmente crezca. El arreglo de piano -que en los cuatro últimos versos es doblado por una guitarra acústica- es tan intenso que en una escucha sin demasiada atención puede confundirse con una entrada orquestal. Al eliminar los bruscos cambios tímbricos -y la subida de la voz que Cash, por supuesto, no hace-, la pobre estructura atada con alambres del tema original queda suavizada y unificada, y se hace un tema no sólo mucho más sutil sino de dinámica más fluída y hasta elegante. Se convierte en la versión original, lo que no le resultará paradójico a cualquiera que haya leído al Borges de Los precursores de Kafka o de Pierre Menard, autor de El Quijote, la que opina con desdén sobre la primer versión, que misteriosamente pasa a ser la segunda.

Porque, ¿qué dice Johnny Cash en esta canción y que no puede decir Trent Reznor aunque haya escrito las palabras? Dice cosas bravas, y cosas tristemente hermosas. La guiñada junkie de los primeros versos pasa a ser una exclusiva referencia al dolor físico -y no porque Cash sea un extraño al mundo de las drogas precisamente-, un dolor que por su propia materialidad -como saben los chicos emos que se apagan cigarrillos en las muñecas- haga olvidar o distraiga del dolor espiritual. Cuando Cash culmina el verso con un resignado but i remember everything (pero yo recuerdo todo) se convierte, una vez más, en una criatura borgeana, pero en esta ocasión es Funes el memorioso, o el propio Borges de sus lamentos tardíos sobre la vejez y el deseo profundo de olvido. No son recuerdos felices los que evoca, ni la frase tiene el sabor agridulce de la nostalgia, sino simplemente la carga del arrepentimiento. No sabemos de qué -Reznor no lo escribió y Cash no lo agregó en palabras- pero hay un profundísimo arrepentimiento que atraviesa la canción y que no se trata -como el hombre baleado en Reno- de una acción concreta que haya dejado una cicatriz, sino de la herida siempre abierta de lo no vivido, lo no otorgado, lo no dado.

Al igual que en 'I see a Darkness', Cash se dirige aquí a alguien a quién llama friend, pero a diferencia de la canción de Oldham, da la impresión de que en esta ocasión -tal vez por el adjetivo sweetest (la más dulce)- se trata de una amistad femenina, posiblemente una amante. Siempre me pareció conmovedor el que un hombre se dirija a su amante como amiga. Las mujeres tal vez no lo consideren así, hay algo que les compele a pensar que esa calificación es inferior a las que denotan directamente la condición de "amada", "amante", "novia" o "esposa", y que connota más bien una cierta categoría de segunda, el "mantengamos esto como amigos y que no vaya más allá".

Sin embargo es uno más de los conflictos terminológicos que suelen hacer que los hombres y las mujeres se estrellen en ataques de incomprensión: el reconocer por parte de un hombre -por supuesto si se está hablando el lenguaje del corazón- la cualidad de "amiga" en una amante, es reconocer un vínculo más profundo e íntimo que el que simplemente se da por la pasión. Al fin y al cabo el amor, o el amor que sobrevive al post-coito, no es mucho más que sexo y amistad. Y no es nada menos: la lápida de Remedios de Escalada, la segunda mujer del libertador San Martín -la esposa niña- la describe como "esposa y amiga", en el mismo plano de importancia. Me gusta pensar que fue el propio San Martín el que lo escribió así. Pero el reconocer a una amante como amiga no es sólo reconocerla en términos románticos o emocionales, también es para un hombre distinguirla como interlocutora. Y a esta interlocutora en particular, Cash le pregunta "mi más dulce amiga ¿en qué me convertí?." Qué pregunta, puta que lo parió.

Johnny Cash era un rey, y como tal las metáforas monárquicas de la canción le vienen como anillo real al dedo (especialmente al dedo medio de su famosa foto de los Grammys), aunque re-significadas, como todo en la canción, el empire of dirt de Reznor posiblemente sea un "imperio de mugre", pero el de Cash tiene que ser más bien un "imperio de polvo" o de "tierra". También hay otra metáfora monárquica en la canción que fue expresamente cambiada en la versión de Cash. La segunda estrofa comienza con un I wear this crown of thorns (llevo esta corona de espinas); en la versión original decía I wear this crown of shit (llevo esta corona de mierda); he leído algunas reseñas burlándose del ataque de pudor que lo llevó a cambiar la letra de la misma forma en que Frank Sinatra cambiaba el escandaloso "Jesus" del 'Mrs. Robinson' de Paul Simon por un incomprensible pero inocuo "Jilly", pero por una vez estoy de totalmente de acuerdo con el cambio más allá de que haya sido un ataque de pacatería o especulación comercial: la corona de Reznor puede ser de mierda, pero la de Cash es de espinas, y eso está escrito en cada arruga de su cara de anciano que realmente vio pasar la historia. Y que da la impresión de que a pesar de considerar a su imperio como algo hecho de tierra y polvo, este lo es sólo en comparación de lo que quiere a cambio, de lo que no se ha merecido y casi con seguridad se traicione más tarde.

Borges, a quién ya estoy nombrando por tercera vez en este texto sobre una canción borgeana o sobre un proceso borgeano de interpretación, hace una oferta similar en Two English Poems, esos poemas tímidos que desmienten cualquier acusación de frialdad endilgada al viejo Georgie por quienes creen que una herida es más profunda si se le hace chorrear sangre por encima de las hojas en las que se escribe mientras se llora como una nena. Al final del segundo de estos textos descorazonados y asordinadamente románticos, Borges ofrece a su interlocutora todo lo que tiene, su propio imperio polvoriento, para terminar con algo que sólo puede ofrecer un solitario que sabe no sólo el valor sino también el precio de la soledad:

I can give you my loneliness, my darkness, the
hunger of my heart; I am trying to bribe you
with uncertainty, with danger, with defeat.


La persona que canta 'Hurt' tal vez ni siquiera tiene eso, sólo la promesa de una futura decepción. No son cosas que se admitan ni se canten con frivolidad.

(Bajo del 117 en 18 y Río Branco y pongo 'Hurt' en el mp3 mientras camino hacia la Plaza Independencia. En la breve cuadra entre Andes y la plaza un chico de unos 14 años, con la delgadez y nerviosismo de los fumadores de pasta, me pide una moneda. Le digo que no y diez pasos después otro muchacho exactamente igual hace lo mismo, vuelvo a decir que no y apenas termino de hacerlo un tercero -este no mayor de 11- me hace la misma pregunta. Acabo de rechazar el pedido de los otros dos en frente a él pero él no ve, no razona, no ingresa la información; está totalmente insensibilizado. A este ni siquiera le contesto, porque la insensibilidad es una calle de doble vía. Atravieso la plaza por la que en lugar de palomas orbitan grupos de turistas orientales que no saben a dónde ir, chicos de la calle y algún empleado tardío de la Ciudad Vieja que cruza indiferente y cansado entre los mangueos. Mientras bajo por Ciudadela, dejo que la canción me filtre y detecte sus propias ilustraciones, sus propias correspondencias, en las zonas baldías de mi corazón. Y pienso en una amiga enferma a la que no fui a ver ni llamé. Pienso en el regalo que no le compré a mi sobrino. Pienso en la colección de mails y mensajes de sms sin responder que se amontonan alrededor de una pereza que me produce un enorme esfuerzo. Pienso en la mínima atención, en el reconocimiento fáctico que a veces niego en automático a gente que me quiere a cambio de nada. Pienso en una chica que cree que sólo fue un polvo más y que sin embargo no hay día en el que no vuelva a él. Pienso en una invitación al pool y al reencuentro que siempre esquivo y que mis amigos me vuelven a extender con paciencia mineral. Pienso en un libro que ya debería estar terminado y que en realidad todavía no empezó a ser. Pienso en la línea de la costa de Punta del Este cuando apenas empezaba el boom de la construcción, en esa calma de arena gruesa y familias pescadoras que ya está perdida bajo la necesidad. Pienso en la cabezota de mi perro esperándome en la cima de la escalera, y en cómo la extraño. Pienso en los hijos que no conozco de personas que estoy dejando de conocer. Pienso en alguien que se va a morir antes de que este año termine. Pienso en cuando era casi un niño y vi The Wall, y pienso en que nunca me hubiera imaginado sentirme así. Pienso en mi generación de emigrantes perdida en el mapa y en los culpables deambulando por la ciudad. Pienso que no los odiamos lo suficiente. Pienso en una mujer solar de la que posiblemente esté enamorado y que creo que ni siquiera sabe que me cae bien. Pienso en que no todo el mundo la mira así. Pienso en los años que se parecen demasiado por nada. Pienso en el tiempo perdido, en el tiempo distraído, en el tiempo indolente, en el tiempo frío. Pienso en el consuelo de la insensibilidad, y su precio grosero. Pienso en el tremendo fracaso que implica el éxito en parecerse mucho a la imagen que elegimos cuando teníamos distintas necesidades).

El idioma inglés diferencia entre los términos solitude y loneliness, que el español unifica toscamente en la palabra "soledad". La solitude es un estado de aislamiento que puede ser accidental, pero que suele ser buscado. No es un término dramático y suele utilizarse más que nada en poesía, para indicar ese recogimiento y voluntaria alienación al que los bardos y los personajes insulares suelen ser afectos. Loneliness es otra cosa y de hecho es más que nada un estado subjetivo, ya que puede sentirse aún estando rodeado de gente. Este estado puede ser nombrado pero no celebrado por los poetas, porque es una carencia, un hambre espiritual. A veces el hambre llama al hambre y los corazones hambrientos de experiencia, de conocer cuantas vidas se puede intentar vivir en una, terminan convirtiendo a la solitude en loneliness. Convirtiendo al deseo en maldición. Y la gente que comprende que nuestras puertas estén cerradas cinco o noventa y nueve veces, pueden no comprender que estén cerradas cien veces, y no volver a tocar. Esto es lo que escucho en la voz de Cash en 'Hurt'; si Reznor sugería que el motivo de su alienación podía ser la adicción a la heroína, hay algo en Cash que sugiere que lo que lo ha separado es la adicción a la solitude y el miedo a dejar de ser uno mismo para subsumergirse en el yo de otra persona. Al fin y al cabo por algo canta -y la voz está a punto de romperse en ese verso- "you are someone else / I am still right here". Y acá hay que reconocerle a Reznor un auténtico acierto; el primer verso hace referencia a una cualidad personal, de tipo existencial, y el segundo, que debería espejarlo para explicar la condición del narrador, es simplemente una definición locataria: vos sos alguien más / yo sigo aquí mismo. Aunque es evidente que no se está hablando de lugares, al menos no físicos.

Detesto cuando alguien define una canción como depresiva, aunque evidentemente hay canciones que lo son. 'Hurt' en la versión original podría ser calificada como tal, porque está llena de esa ceguera a la autovaloración y la belleza no evidente de la vida, que es uno de los síntomas más claros de la depresión. Pero 'Hurt' en la versión de Cash no es depresiva, es triste, porque los hechos objetivos están en contra del cantante. Él está hablando de lo irreparable desde un lugar más bien definitivo, pero sin embargo sigue ofreciendo cosas, sigue calificando amorosamente a su destinataria y soñando con otros mundos en los que las segundas oportunidades sean infinitas, o al menos más numerosas que en este. 'Hurt' es, incluso, una canción de advertencia a los amantes de la solitude, a los arrogantes compañeros de sí mismos.

En los mismos días en que estuve orbitando esta canción y el mobiliario polvoriento que había removido, también estuve escuchando otra que funciona casi como su antídoto. También habla de la solitude desde su título, 'Adventures in Solitude' y pertenece a esa banda que funciona como un colectivo emocional, los canadienses de New Pornographers. Y en ese tema, el más delicado de su disco más íntimo, Challengers, A. C. Newman confiesa en el estribillo: We tought we lost you / we tought we lost you / Welcome back.

Pensábamos que te habíamos perdido, bienvenido de vuelta. No se escucha muy seguido ese tipo de ofertas. En un mundo mejor, es lo que nos gustaría que se le contestara al melancólico cantante de 'Hurt'.

70 comentarios:

Anónimo dijo...

Brillante, conmovedor, removedor.
Mis respetos.

El Archivista dijo...

Acabo de empezar el día leyendo el post. Me esperan enfermos,hospitales y deudas casi imposibles de pagar.
Es bueno sentir que hay tantos artistas que pueden movernos con sus (o de otros) canciones.
Me ducharé escuchando Nusrat Fateh Ali Khan para lavarme un poco el alma antes de salir a la calle.

Eso si; Roberto Marley me acompañará luego porque los que se fueron siempre están de alguna manera. Y todo va andar bien.

Gracias, muchas gracias por un desayuno negro que transformará en colores mi día.

Ezequiel dijo...

Excelente el post y muy conmovedor, y muy aguda la addenda de 'adventures in solitude' de los Pornographers que también escuche bastante e incluso me hizo cuestionarme la diferencia entre 'solitude' y 'loneliness'.

Pero aunque me gusto mucho el post no estoy de acuerdo con la tesis global, o sea, a la diferencia tan drástica entre la misma canción que tuvo alterada solamente a) el arreglo y b) el ejecutante, y cantante y voz de la canción.
O sea, si, hay una diferencia abismal entre la figura de Cash y la de Reznor, casi puestos uno en cada extremo del espectro, pero vamos: La canción es la misma.

Yo tuve una época fan de nine inch nails. Si, tenia 16-17. Si, me gustaba Hurt y la escuchaba mucho. Si, hace ya varios años que ese "liar's chair" y "crown of shit" me parecían una pajería teenager OH THE DRAMA insoportable. Igual a Trent un poco lo banco. ¿Porque? Por un lado porque es un productor muy bueno e interesante. Por otro lado porque escuchar el black-hole que era el downward-spiral a los 16, quiera uno o no, afecta. Ese disco era violento, che.

Al mismo tiempo nunca me consideré fan de Cash. Me parece un groso, todo bien, lo re-banco, pero no lo escucho. Eso obviamente explicaría por que mi reacción a las dos versiones sea muchísimo más moderada. Me parece que "Hurt", por NIN, es un acierto en ese disco, pese a su brutalidad, tiene sus altos detalles ('my sweetest friend', 'i'm still right here', el final que deja una puerta de esperanza junto con el ruido que es parte de toda la idea conceptual de ese álbum, y que es parte muy importante de la canción en mi opinión) y que bueno, es efectista y funciona. También recuerdo una versión en vivo que tenia de fondo imágenes de animales en fast-reverse descompuestos, re-armandose de a pocos. Funcionaba muy bien.

Que Johnny Cash haga su versión fue una idea totalmente brillante de Rubin, estamos de acuerdo, pero en si es como una especie de casualidad perfecta. Es casi demasiado obvio, como algún crítico alguna vez comento y estuve de acuerdo, "es como hacer tiro al blanco con el Empire State". Iba a funcionar. Lo que hizo Rick Rubin fue dejarla más delicada y sacarle la bullshit. No era necesario tanto esfuerzo.

En fin. En mi opinión, una canción con mucho potencial agarrada en las manos perfectas, pero no encuentro esa diferencia tan dramática entre las dos. Pero ese soy yo, que escuchamos las canciones en orden seguramente inverso y con efecto emocional inverso también.

gervas dijo...

qué bueno tomarse un tiempo para reivindicar a Georgie.

Ezequiel dijo...

Ah, me acordé de algo. Hay una versión de hurt hecha por NIN llamada hurt(quiet) que no tiene el final over-the-top y esta toda menos rota y es bueno, mas 'quiet' y delicada. Esa fue la que más escuché y preferia sobre la original.

Ezequiel dijo...

Ahi escuche de nuevo la versión original y la versión de Johnny Cash.
Ok si, la de JC le rompe la cola. Igual mantengo mi postura que bueno, habia material más que interesante en la original. Eso.

Anónimo dijo...

A mi me pasó algo muy muy parecido con esa misma canción. Hasta el día de hoy, escucharla me recrea aunque más no sea en un amague de segundos esa sensación de melancolía que sentí la primera vez que la escuché.
(La “friend” a la que alude es efectivamente una mujer, su segunda mujer June –esa misma que la patética Reese W. trató de encarnar en Jonny and June–, que aparece en el video parada cerca de él mientras canta)

Jhonny dijo...

Qué difícil se hace comentar algo como : "mi más dulce amiga ¿en qué me convertí?." . La verdad es en que el contexto en el que lo venís explicando, dan ganas de llorar.

De Cash a The New Pornographers. He cargado el mp3 con muchas canciones de los canadienses, y con los dos discos solistas de A.C. Newman, para salir a patear la calle con ganas. Nunca ha fallado.

Ojalá que lo que venga sea mejor.

benito dijo...

ezek: lo que pasa es que no sos muy fan del jazz, si no coincidirías más. Me explico, para los jazzeros es bastante normal agarrar cualquier tema y considerarlo un mapa (por poner un ejemplo que te resulta interesante), un formato, en el cual uno puede meter cualquier cosa personal. Es decir, los derechos de autor de 'My Favourite Things' seguirán yendo siempre para Rodgers-Hammersmith y sus herederos, pero lo que hizo Coltrane con esa canción es llevarla a una nueva dimensión musical-sensorial que jamás estuvo presente en la canción original de La novicia rebelde.

De cualquier forma nadie es tan alquimista como para hacer oro de la mierda, por lo menos necesitás plomo para hacerlo, y algo de plomo hay en Reznor, que duda hay.

gervas: siempre hay un buen motivo para reivindicar/citar o simplemente vitorear un poco a Georgie todos los días. Yo, con Borges (al igual que con AC/DC o Walter Hill), a esta altura soy como un energúmeno: si no te gusta, no me lo digas y si me lo decís no te quedes cerca mucho rato.

Emily: sos más radical que yo en la adjudicación de la autoría definitiva de 'Hurt' a Cash. Tengamos en cuenta que lo de "my sweetest friend" ya estaba en el texto de Reznor.

Lo de la cantidad de veces que se puede escuchar el tema es, realmente, increíble. Y es una diferencia enorme con la versión de NIN, que se caracteriza justamente por agotarse enseguida. Un músico amigo me dijo que siempre que veía el video de 'Hurt' -un video que no tiene golpes bajos porque todo el video es una especie de mazazo en la boca del estómago- se ponía a llorar. Y es cierto, al menos para un melómano mínimo, es imposible verlo de punta a punta (esa escena en la que el viejo derrama el vino sobre la mesa, el "i remember everything" sobre el documental de los trenes...) sin moquear un poco.

Si no chequeen:
http://www.cmt.com/videos/johnny-cash/26385/hurt.jhtml

mg dijo...

La escuché y vi el video hace años sin tener mucha idea de quién era Johnny Cash y se me hizo un nudo en la garganta. Si lo veo ahora no sé si podré aguantar.

Saludos.

Anónimo dijo...

Bemnito pegale otra escuchada a la version de NIN, la cancion es muy buena y el video esta genial,
mas si tenes en cueta que fue hecho en la epoca de super FXs ediciones al repalo y ahi ves a T.R. solo ante un pantalla gigante sin edicion, crudo como la misma cancion,
la version de Cash es muy similar, cambia los teclados por la guitarra acustica, esta muy respetada la original,
y para realzar una no es necesario desmerecer la otra
lo que esta claro es que es un TEMON !!!

kristo eleniak dijo...

benito, es cierto, hay canciones que abren puertas que quizás preferiríamos dejar cerradas.
me pasó hace muy poco con "the traitor" de l cohen.

Anónimo dijo...

Benito:

de acuerdo con que el cambio interpretativo de reznor hacia Cash sin duda favorece la canción. Reznor mismo dijo hace unos meses - sobre porqué ya no cerraban el recital con Hurt - que el sentía que esa canción ya no le pertenecía, que Cash se la había robado y llevado a la tumba.

La versión de Cash es violenta, conmovedora. Que esa canción esté cantada por un viejo de 70 años - en el ocaso de su vida - le da una nueva perspectiva, un verdadero peso a lo que se está diciendo. Yo cuando la escuché por primera vez quedé rasgado.

Pero no estoy de acuerdo con el vapuleo a Reznor. Tiene la cosa teenager rompe pelotas, pero sus discos suenan y tienen una elaboración musical descomunal - al menos the downward spiral o the fragile .

Cromatismos, baterías fuera de tiempo, poliritmias, experimentos tímbricos, atonalismo, ostinatos, sintesis modular, granular, física. Eso sin contar las mezclas, que son algo de otro planeta. El tipo maneja TODOS los recursos - es casi intimidante el nivel técnico que el tipo desarrollo en esos discos.

Reznor no es un innovador, no es un iconoclasta, pero esas no son las únicas categorías que vuelven a un músico importante.

Reznor es un músico pop con una técnica descomunal, capaz de articular en un contexto pop, música absolutamente alejada de ella. Con el límite de tener el pathos de un pibe de 16 años.

mvc dijo...

A mi tambien me gusta mucho la versión que hizo de I won`t back down de Tom Petty. Aunque la version de "Hurt" es SUBLIME.

Excelente post Benit. Me quedé pensando en el comentario de Ezek y tu respuesta y como estas cosas varian tan radicalmente de la cultura rockera a la cultura del jazz. (El jazz practicamente ES tomar algo ajeno y hacerlo propio, dicho sea de paso, ¿te veo en Mayo con Ornette Coleman?)
Para mi, un tema es siempre de quien lo interpreta, independientemente de quien sea su autor original. Es la interpretación lo que da vida a una canción. Nunca es el mismo tema. Las dos versiones de "Hurt" no pueden son la misma canción porque simplemente no creo que las canciones tengan una existencia independiente a su interpretación. Mientras no son ejecutadas, las canciones no existen. En el arte, para mi, lo importante siempre es la forma.
Yo incluso, peleandome con amigos, llevo esta posición a algo mas extremo. No solo no creo que una canción tenga una existencia independiente a su interpretación, sino que no creo que una canción exista sin un oyente. Es en el momento que alguien la esta escuchando, que la canción termina de cobrar vida. Es la relación momentanea entre obra y espectador que la magia ocurre. Por lo tanto, no creo que las canciones puedan ser "buenas" o "malas" por si solas. Nisiquiera creo una cancion sea la misma, por mas que la hayamos escuchado 5000 veces a lo largo de nuestra vida. Cada vez que las escuchamos es diferente, porque nosotros siempre cambiamos y el contexto siempre es distinto. Hasta la canción mas pedorra puede llegar a ser sublime si llega en el momento indicado, y hay veces que canciones que amamos las odiamos si caen en un instante poco adecuado.

mvc dijo...

Al final de mis jornadas soy muy de cargar muchas canciones al azar en el win amp y poner "shuffle" porque me gusta relajarme y no saber cual es la proxima canción que va a venir. Hoy recien justo el shuffle mando "hurt" de j cash y pegada a esa otra canción que me gusta mucho y me provoca la misma conmoción emocional que esta "Sword of Damocles" de Lou Reed. Obvio que lloré.

Queria comentarlo nomás

Nico Peruzzo dijo...

Ignoro que tan involucrado estuvo Cash a la hora de la elección de temas o colaboraciones de sus American Recordings pero siempre fue un tipo artísticamente inquieto -recordar su participacion surrealista en el tema que cierra Zooropa: The Wanderer-

Así que es probable que ya conociera una canción como Hurt.
La oscuridad de Nine Inch Nails le viene como anillo al dedo a Cash.
Leyendo esto recordé lo que escribió Dylan en su autobiografía sobre la primera vez que escucho I Walk the Line:
“Es una de las composiciones mas misteriosas y revolucionarias de todos los tiempos. Johnny canta como si la vida se le fuera en ello. Su voz es tan grave que empequeñece el mundo…”


Por otro lado, no estoy para nada de acuerdo con tu visión de Reznor y NIN. Claro que yo los empecé a escuchar hace casi 15 años, cuando era un pendejo.
Tal vez sea difícil entrarles si los descubrís con más edad. Es como AC/DC. Son una de esas bandas que entra en tu vida a una edad en la que no le cuestionas nada a un grupo de rock. Y con los años los seguís escuchando no solo por sus virtudes musicales sino porque tienen ese aporte extra que traen desde el pasado. Como el olor que tenia la casa de tus abuelos.

Volviendo a NIN, tuve la suerte de verlos en vivo el año pasado y fue espectacular. El pico de la actuación fue la obviamente la versión de Hurt. Históricamente era tocada en piano, pero esta vez la hicieron con guitarra (solo Reznor y Robin Finck, también guitarrista de los nuevos GNR). Esta versión es mucho más cercana a la de Johnny Cash.

Sobre la madurez compositiva de Trent Reznor, te podría recomendar que escuches el doble The Fragile editado en 1999, o especialmente el disco instrumental que saco el año pasado Ghost I-IV.

Independientemente de lo artístico (NIN no tiene por que gustarle a todo el mundo) Reznor ha sido uno de los tipos que mejor ha aprovechado la debacle del CD y el advenimiento de las descargas digitales.
Para promocionar su disco Year Zero, en 2006, dejo pendrives en los baños de los conciertos -que incluían algunas de las nuevas canciones- para que la gente las suba a internet.
También puso en su pagina casi todas las canciones de su catalogo, pero con las pistas separadas, para que los fans las remixen. Esos remixes son luego subidos a la página de NIN para ser descargados.
En 2008 saco un disco gratuito, The Slip, para ser bajado desde su página, y sobre fin de año puso a disposición más de 400 GB de video de alta definición con 3 conciertos de la última gira. Son imágenes en bruto para que los fans las editen y las vuelvan a subir a la página.

Y finalmente, hace menos de un mes empezó a agitar a los Janes Addicion para que se junten -los 4 de la formación original- y salgan de gira juntos (para rememorar el primer Lolapalooza).
Actualmente andan dando vueltas por EEUU, con una gira llamada NINJA (gran titulo).

Para finalizar con Cash, de los American tambien son muy recomendables las versiones de Redemption Song junto a Joe Strummer o Father and Son con Fiona Apple.
No recuerdo en cual disco estén. Tal vez sean del box set de descartes.

Anónimo dijo...

Benito, te admiro.
Yo habitualmente cuando me cruzo alguno de estos gurises-fantasmas que intenta manguearme no puedo pensar en nada mas que ellos durante un buen rato.

Horacio

Cacho_vela_crush dijo...

considero igual que zitarrosa hizo cosas mejores, (sin la necesidad de acudir a guitarra negra que lo hace ganar por goleada a cualquiera) de hecho también hizo peores, pero en particular lo intenté y no me llega cash, dificilmente me llega la música en ingles, lo he intentado varias veces, siempre menosprecie (a la manera de ignorante obstinado) del inglés lo mismo que explicas en el comienzo, mierda es todo más facil en inglé, la pronunciación hace que cantar sea un conjunto de gruñidos como bien ejemplificas. Sin embargo me emociona el frances y el tano, en inglés me gusta lo agresivo pero no lo melancólico, en fin rumiaciones mias.
emocionante post.aguante darno, si pueden consigan el disco con cabrera que es una cosa bárbara, tiene un par de temas versionados con el cuidado y la calidad que solo ellos pueden.

Anónimo dijo...

cannot a beastly thing be analogous to a fine thing if both are apprehensions? love of two things often makes one thing right.
(...)

Anónimo dijo...

Horacio, pasate para el blog de al lado. Acá solo peleamos para ver quien la tiene más corta

Anónimo dijo...

También sucede que la voz de Cash, como la de Zitarrosa, otorga gravedad y dignidad a cada palabra. Para colmo en la canción hay cierta imaginería bíblica que le sienta de perlas (la corona de espinas, el trono, el imperio de tierra).

Lo que me sorprendió mucho (gratamente) es la lectura en clave bossa que se mandó El Príncipe de la monumental "Milonga para una niña". Sobre todo ahora que la bossa se usa como coartada cool para masacrar cualquier canción.

RT

Anónimo dijo...

Benito, que gusto volver a leerte escribiendo sobre musica. Cuando los posts incluyen politica se me hace un poco mas dificil encontrar algo que apreciar.
Hace mucho tiempo que no escucho los American Recordings, y honestamente, no se si tengo ganas de volver a escuchar Hurt. Será que estoy en un período de happy music y los Fountains of Wayne no abandonan mis parlantes, pero en cualquier caso creo que nadie puede poner en discusión que Cash fue un grande. Por diferentes motivos la figura de Dylan fue mucho mayor fuera de USA, pero ojo que Cash en lo suyo, no tiene nada que envidiarle a Zimmerman.
Un poco triste, pero me suena que cierta la semblanza del Centro. Esas imágenes me hacen cuestionar mis argumentos denostando mi irreal mundo corporate. Al final, no sabes donde es mejor estar... Salutti, Anon 06:49

Anónimo dijo...

Perdon, me olvidaba, MVC planteó muy bien algo que siempre consideré. El contexto hace mucho a la canción, incluso las mas boludas. Adam Duritz de los Counting Crows tiene un timbre de voz que siempre me conmovió, y por cantidad de recuerdos asociados, It's raining in Baltimore no falla en dejarme un nudo gigante en la garganta y una sensación de desolación pavorosa, hasta de miedo. Anon 06:52

Anónimo dijo...

Vamos a traer a la mesa de los poetas a las mujeres que interpretan la vida de esa manera. Para hacer una listita a cuenta de mayor cantidad, a mí me pueden:
Joni Mitchell, Carole King, la Piaf, Ella, Janis, Sinéad y la lista se hace enorme. Cómo vos también "pienso en una chica que cree que sólo fue un polvo más y que sin embargo no hay día en el que no vuelva a él."Y si bien mis compañeros de género me emocionan y hablan por mí mejor que yo, me gusta escucharlas a ellas.
Muy bueno lo tuyo Benito.
Abrazos

benito dijo...

kristo: 'The Traitor' es una canción muy, muy grosa, del que para mí es el disco más ninguneado de Cohen (y mi favorito). Y de hecho es posiblemente mi canción favorita de Cohen -junto con otro tema ninguneado, 'The Night Comes On'. Estuve algunas veces a punto de escribir sobre 'The Traitor' porque el punto de vista me parece alucinante; el abandono consciente de la militancia (política o estética, o ambas) en virtud del egoísmo emocional. Y con resonancias de la Guerra Civil Española. Es genial.

Dopelganger, Nico: Abrí el paraguas respecto a algunas posibles virtudes musicales -de cualquier forma en mi opinión menores en relación a otros músicos con buen manejo de la tecnología digital y perfil más bajo- de Reznor, pero sobre gustos no me voy a meter. De cualquier forma el que un treintañero componga -como dice Dopelganger- con el pathos de un chico de 16, lo invalida como compositor a tomar en serio. Sea Reznor o los de TKVNG. Y con la única disculpa de Jonathan Richman.

mvc: totalmente de acuerdo en relación a la relación subjetiva en cuanto al momento en que se escucha la canción, pero de cualquier forma hay una serie de parámetros en los que uno -o una cierta comunidad crítica- evalúa los méritos de la misma. 'Sword of Damocles' es mi canción favorita de un disco tremendo, pero que me cuesta mucho escuchar como integrante de una familia muy tocada por el cáncer.

Rodrigo Terranova dijo...

"Sword of Damocles"... siempre me pareció que cuando los 4 Jinetes del Apocalipsis le metan espuela a sus corceles, la música que va a sonar será esa.

Siendo un devoto de Cohen, inexplicablemente escuché hace muy poco el "Various Positions", y más allá de contener temas conocidos como "Hallellujah" (y ahí, lo siento por Leonardo, la versión definitiva es la de Cale) o "Dance me to the end of love", la canción que me rompió la cabeza fue "The night comes on".
Madre, padre, mujer, hijos, amigos... "and here's to the few who forgive what you do, and the fewer who don't even care". Qué mundo sería este si todos viviéramos bajo ese precepto. Es una canción que debería analizarse en las escuelas.

RT

martín dijo...

Desde el primer día que la escuché, me di cuenta que, como dice ezequiel, la versión de cash le rompe la cola a la de NIN. Definitivamente llevó la canción a otro nivel, y es mucho más emotiva y triste. Pero también creo que en el original había bastante más que algo de plomo de donde sacar oro. Tampoco me parece que ser o no ser fan del jazz influya en lo más mínimo al comparar las versiones.

No creo que ser treintañero y componer con el pathos de 16 invalide a nadie como autor. Importa si lo hace honestamente, y si ese pibe de 16 tiene algo para decir o es un pelotudo irremediable.

Walter Hego dijo...

El Magic and loss lo he oído algunas veces (de hecho, me compré el cassette cuando se editó acá), pero es un disco que nunca logró entusiasmarme. Aunque entiendo que a alguien que haya pasado (directa o indirectamente) por la experiencia del cáncer, The sword of Damocles le resulte especialmente conmovedora.

Para mí, uno de los mejores discos de Lou Reed, si no el mejor, es New York.

Y aunque lo siguiente no tenga un carajo que ver con Cash, Cohen ni Reed, pero como es un descubrimiento para mí muy reciente y me tiene francamente entusiasmado, he de decir: qué canciones de puta madre las de Robyn Hitchcock, lo parió. Y pensar que hace treinta años que grabó el primer disco (como integrante, en ese entonces, de los Soft Boys), y yo recién lo vengo a descubrir ahora. Pero bue, más vale tarde. Que no nos falte nunca la red.

kristo eleniak dijo...

el "magic and loss" es demasiado, no? demasiado oscuro y fuerte.
también absolutamente hermoso.

estoy en un momento en el cual siento más potente y redonda la obra de cohen que la de dylan. recibo golpes.

si, la versión de cale de "Hallellujah" es probablemente la definitiva.

El gaucho insufrible dijo...

Muy bueno,...
¿Nunca se te ocurrió agarrar "the best of" Dragon Lieder y publicarlo en un libro?

Walter Hego dijo...

A propósito de algo que se ha mencionado más de una vez en estos comentarios, entiendo que usar la palabra inglesa "pathos" (idéntica a la transliteración del vocablo griego del que deriva) es muy cool, pero digo yo, ¿qué pasó con la vieja, querida y castellana "patetismo"?

Anónimo dijo...

Me quedo con lo que decía "galochas"... Todo bien con los (pocos) cantantes hombres que son capaces de evocar cosas complejas con sus voces, pero para mover esas "no malas partes que tal vez dificultan el vivir más de lo que lo ayudan" (como tan poeticamente lo dijo el dueño de casa) yo normalmente necesito de la voz de una dama.

"Hurt" en particular no me hizo mucho efecto (un amigo me la hizo escuchar hace tiempo porque le había encantado), pero sin duda que hay cosas de Dylan, Reed, Cohen, Cave o Stipe que hacen que a uno se le piante un lagrimón.

Pero en términos de cargar una canción de emociones complicadas, los cambio a todos juntos, pelo a pelo, por Beth Gibbons :)

benito dijo...

Rodrigo: no sé por qué pero -aún reconociendo que su primera obra es más impactante y poderosa- mis discos favoritos de Cohen son los de ese tiempo oscuro, el anterior a I'm your man (que nunca me terminó de convencer), es decir, el Recent Songs y el Various Positions. El VP en particular me parece el más irregular de los dos (el RS no tiene canciones malas), pero es el primer disco de Cohen realmente orientado a lo político y es el más bíblico de todos. Como ya dije, tiene canciones malas, pero un disco que tiene 'Night Comes On', 'Hallelujah' e 'If it be your will', es enorme.

kristo: bien metida, referida a un post que se basa mucho en comparaciones de versiones, la comparación entre el 'Hallelujah' de Cohen y el de Cale. El proceso de reducción que hizo Cale no es muy diferente del que Cash hizo con 'Hurt'. Aunque en mi opinión partió de una canción muy superior (y que ya se la bancaba sola). Lo que es interesante es que la versión de Cale es la primera editada con la letra "romántica", mientras que la de Cohen en el VP es la letra más religiosa (luego fusionaría ambas en Cohen Live), lo cual le vino de maravillas a la emoción absoluta que Cale le pone a la voz (Cale es un cantante ENORME, mil veces mejor que Joe Cocker).

No sé qué decirte de la comparación Cohen-Dylan; yo he tenido momentos de favortisimo por ambos, pero en lo general te diría que Dylan aguanta más escuchas por ser un poco más pop -y menos literario- y porque generalmente sus discos son mejores en lo musical. Y en cuanto al Magic and Loss...

Engancho con Walter: Es un disco tremendo y en algunos aspectos uno de los discos líricamente más transgresores de la historia del rock. Sólo a un enfermo como Reed se le puede ocurrir dedicar un disco entero al tema tabú de occidente -la muerte- y en particular a sus dos enfermedades tabú, el cáncer y el SIDA. Sin embargo falla un poco en la producción musical: las melodías no son tan buenas y el sonido general -el muy ganso estaba entusiasmado con una guitarra digital bastante fea- es bastante inadecuado salvo excepciones como 'Sword...', 'Warrior King' o la del mar. Justo el otro día hablaba con un amigo comparando ese disco con el New York. El New York (para mí en absoluto el mejor disco como solista de Reed, puesto que se lo doy al increíble Street Hassle o incluso al Ectasy), es musicalmente brillante y con el sonido justo, pero teclea bastante en las letras: salvo 'Romeo had Juliet' y 'Dime Store Mistery' es un disco muy tosco y tiralínea en lo lírico, y no está a la altura de sus mejores trabajos. Es como mis posts de política.

No me parece que hablar de pathos sea un esnobismo; yo por ejemplo no hablo del ethos porque me parece que el término "ético" lo sustituye muy bien, pero "patético" tiene todo un márgen connotativo que no tiene nada que ver con el concepto original de pathos, que creo que no tiene traducción adecuada y que es lo bastante vox populi como para poder usarse sin problemas. Como el cool que vos metiste.

Rod, galochas: shame on you, ¿cómo van a andar comparando a los grandes cantantes/poetas del rock con una manga de brujas escapadas de la cocina? Posiblemente tanta identificación esté ocultando un espíritu muy femenino y muy reprimido... Bien, ahora que ya hice mis chistes tontos homofóbicos y misóginos (hay que soltar vapor), tengo que confesar que soy bastante indiferente a muchas de las grandes intérpretes y creo que conecto más con el universo de los songwriters loner. Salvo Patti Smith, alguna cosa de Suzanne Vega y Judy Sill (que siempre me pone la piel de gallina), no creo que haya compositoras que hayan ocupado en mi vida un lugar similar al de Neil Young o Shane McGowan. Sin embargo estoy convencido que el mejor letrista en inglés de la actualidad es una mujer, la única no sólo capaz de igualar sino también superar a Will Oldham, y es Rennie Sparks, la letrista de The Handsome Family. No se puede creer lo que escribe esa mujer encantadora, tal vez una de las mayores escritoras de la música de los últimos 30 años.

Y como artista meramente pop (pero nada tonta), la Spektor anda volando.

Walter Hego dijo...

Benito: Quizá debí decir "uno de los que más me gusta, si no el que más me gusta de los que conozco". Porque esos dos que nombrás no los he oído, e incluso no recuerdo si los tenía de nombre.

Pero bueno, gracias por el dato. Ya los voy a bajar y después te cuento.

benito dijo...

Ectasy es el disco de Reed del 2000, y el que presentó en Uruguay cuando vino. El muy hijo de puta prácticamente no tocó nada que no estuviera en ese disco, pero por suerte estaba presentando un muy buen disco. Es ligeramente conceptual y en cierta forma emparentado con el New York, pero en versión más sexual-drogona y menos política. Es irregular (como casi todos los discos de Reed), pero tiene algunos aciertos memorables.

Street Hassle es, para mí, el único disco de Reed solista que está a la altura de su trabajo en Velvet. Es un disco mugriento, que arranca con un tema casi igual a 'Sweet Jane' y que Reed comienza cantando los primeros versos de... 'Sweet Jane'. En esa época Reed estaba bastante colocado y borracho, y había formado una banda muy experimental y jazzera (en el disco hermano de Street Hassle, The Bells, incluso tiene a Don Cherry tocando en un par de temas), sobre la que podía improvisar, especialmente de palabra -el disco en vivo de esa época Take no prisioners es más un disco spoken con banda atrás que un disco en vivo de rock-, pero era una banda colosal, rea y enérgica, con coros de minas y vientos. Street Hassle en particular es su respuesta al punk y es un disco muy experimental, y el tema que le da nombre -un lamento porque lo había dejado su novia travesti, Rachel- es posiblemente lo mejor que escribió Reed desde los días de Velvet: son 11 minutos de un riff valseado que va mutando -y que incluye un speech de Bruce Springsteen (!!) en un momento-, es brutal y con un final conmovedor ("love has gone away...")

Otros discos buenos de Reed solista son el Coney Island Baby (aunque más no sea por el tema que le da nombre y por 'Kicks') y los dos que nombraba antes de la época de Street Hassle (el tema 'The Bells' es también impresionante, y la versión de 'Satellite of Love' del Take no prisioners es la mejor que existe). Y también me parece genial el Songs for Drella, pero creo que el mayor mérito ahí es de John Cale.

De hecho, como solistas, la carrera de Cale es muy superior a la de Reed. Es increíble que ese hombre no sea tan venerado como Dylan o Neil Young.

kristo eleniak dijo...

estoy de acuerdo, cale es un excelente cantante.

stipe interpretando hairshirt o cualquiera de las canciones del up (a mi triste entender el mejor disco de r.e.m.)es muy bravo.

otra versión: darnauchans reinterpretando en clave road movie "de corrales a tranqueras"
de osiris.

gran entrada estimado benito.

Nico Peruzzo dijo...

¿Alguien de esta página puede confirmar el rumor que dice que Lou Reed estaba de muy buen humor aquella noche en el teatro de verano?
Que quedo muy agradecido e impresionado de que nos quedáramos a pesar de la lluvia, y quizás por eso nos recompenso con esos 3 “hits” al final del recital

Para complementar las virtudes de un disco como Street Hassle, me gustaría agregar la fantástica portada del disco. La foto de Lou Reed con cara de carbón hijo de puta es el resumen perfecto del mood de esas canciones.
Mis temas favoritos de Reed están en The Blue Mask: el tema homonimo, Women, Underneth the Bottle, Waves of Fear, The day John Kennedy Died.
No se por que no es un disco mas difundido...

Hablando sobre gente poco difundida, a raíz de un capitulo de la serie Californication descubrí a Warren Zevon. Pocos días después de haberme bajado su Gratest Hits, escuche un tema suyo en un documental sobre Hunter S. Thompson que esta pasando HBO en estos días.
Me llama mucho la atención no haber oído hablar antes de este tipo.

Sobre la versión definitiva de Hallelujah, creo que a la de Jeff Buckley no hay con que darle...

PD: para los que no detestan a Nine Inch Nails (creo que somos minoría acá) Trent Reznor acaba de subir en su página un EP de promoción para su gira: 2 temas inéditos de NIN, 2 inéditos de Janes Addiction y 2 temas de street Sweeper, la nueva banda de Tom Morello.

Anónimo dijo...

Walter: cuando usé lo de pathos, lo estaba usando en el sentido de la filosofía clásica antigua - los modos de retórica y persuasión y el tipo de interpelación sentimental a la que apela la música. Como muchos conceptos griegos(loghos, pyshque, aestethis), no tiene una traducción equivalente a nuestro idioma.

Benito, creo que no vamos a estar de acuerdo con NIN. No importa eso. Mi argumentación va más en busca de defender el valor real que para mi tiene esa banda. Y trato, probablemente en vano, de persuadirte de que no le des bola al pathos de 16 años - generado por la figura de Reznor como cantante y como frontman - de una banda que tiene MUCHA música instrumental de mucho valor - bien alejada de la autocompasión que tanto te disgusta.

Sobre Lou Reed: a mi su carrera solista me parece una de las carreras más sobrevaloradas del rock. Los discos de Lou, incluso los que tienen unos cuantos temazos (berlín, transformer, ectasy), tienen también, unos cuantos temás pedorros. Exceptuando Metal Machine Music, la mayoría de las cosas que hizo lou reed solista, bordean un terreno mucho menos interesante y arriesgado que el que manejaba Velvet Underground.

Yo también prefiero a John Cale, aunque yo también creo que LA versión de Hallelujah es la de Jeff Buckley (un músico que para mi, tiene momentos geniales y momentos horribles en distancia de un minuto y medio).

Tengo que reconocer que en la diyuntiva Cohen/Dylan, suelo quedarme con el viejo leonard. Supongo que algo de su permanente estado litúrgico va bien con mi personalidad, a lo que le sumo un exquisito y negrísimo sentido del humor, que para mi Dylan no tiene. Dylan tiene un sentido del humor más ácido, cínico, distinto. Siempre preferí el de Leonard Cohen . Para mi el disco más redondo de él es New Skin For the Old ceremony . En ese disco se conjugan muchos registros de él. El litúrgico (who by fire), el humorístico (field comander cohen), el ácido (There Is a War). De todas formas, Leonard suele ser bastante parejo en términos de calidad de sus canciones. El asunto, posteriormente, al menos para mi, es la producción. Los arreglos de I'm your man y The Future, aún entendiendolos en su contexto cínico, me resultan complicados de tragar.

benito dijo...

kristo: de alguna forma coincido en parte con tu diagnóstico del Up, disco que descarté como basura cuando salió y que de prontó me deshizo a traición (aunque sigo pensando que es muy irregular y tiene una pobre construcción como disco).

nico: sí, al parecer tuvo una buena impresión del público local y el que se bancaran todo el recital bajo la lluvia. Yo no me canso de repetir que de las cuatro veces que vi a Reed (incluyendo una en NY), el show de Montevideo fue -lejos- el mejor, y eso que yo estaba con una resaca imposible.

Conozco gente que trató con Reed tanto acá como en Buenos Aires, y la impresiones son muy disímiles: si bien hay un consenso, sobre todo entre los que estuvieron más con él, de que Reed es intratable y un auténtico déspota con sus subalternos, también hay testimonios montevideanos -particularmente de un par de amigas mías que lo conocieron por separado- de que el tipo fue capaz de comportarse en forma extremadamente caballerosa. Pero bueno, eso de dar impresiones diametralmente opuestas es algo bastante frecuente (supongo que alguna lectora me va a entender)...

doppelganger: la autocompasión me disgusta, pero cuando está mal expresada me indigna. Es decir: me banco a Gordon Cano o a Morrissey, pero no a Reznor o al ganso pelado de Staind. Repito que no me cuesta admitir -ya lo hice en el post- la habilidad como programador de Reznor y su olfato para algunos timbres, pero tampoco le he escuchado algo tan deslumbrante como para eclipsar a la gente directamente dedicada a eso y proveniente del ámbito electrónico. (fijate, por de pronto, que vos mismo admitís que en el caso Cohen vs. Dylan te interes más bien poco el aspecto de la producción, y este es el aspecto más destacable de Reznor, que igual me parece inferior a su colega y (ex) amigo Jourgensen).

Reed está sobrevalorado, pongamos, en relación a Cale, pero por más de que sus discos suelan tener relleno y sean prácticamente siempre inferiores a su trabajo en Velvet (en el medio hubo una notoria crisis de autovaloración de la que posiblemente no se recuperó del todo jamás), lo que hay de bueno en ellos le asegura un lugar en la primera fila. Y, como buen lector de Lester Bangs y gran amante del ruido, el Metal Machine Music es un enorme gesto conceptual artístico, pero no es un buen disco, ni siquiera juzgado dentro del paradigma experimental o el de los drones. En cambio Tranformer o Street Hassle sí son musicalmente significantes dentro del paradigma del rock. Que ninguno de ellos me haya puesto la piel de gallina como 1919 o Helen of Troy no me impide reconocer que son discos grandes y no precisamente sobrevalorados.

La versión de 'Hallelujah' de J. Buckley me dejó siempre indiferente. Me parece un gran despliegue de un timbre vocal hermoso, pero nunca puede escuchar ni la plegaria de celebración fatalista ni la celebración de la carne en su versión.

Anónimo dijo...

me gana la pereza para pasar lista de poetas, interpretes y divinas mujeres. Además ya se gastaron todos los adjetivos elogiosos en tipos.
a vos no te cantaba tu mamá?

Anónimo dijo...

Hago la precisión de que mas allá del escribir las letras (donde me sigo quedando con varias damas, pero en términos relativamente parejos), está el tema de interpretarlas donde ahi si es donde yo "siento" una diferencia muy grande.

Digamos, Cohen escribe la enorme "Came so far for beauty" y la arregla y canta muy bien en su disco.

Pero después viene la semi-desconocida Stina Nordenstam, le pone una base semi-electrónica y medio bandida robando guitarras y coqueteando con cosas de glitch, y el tema crece abundante en expresividad para mi gusto.

Creo que hay cosas que se prestan más para ser interpretadas por un género o el otro. O sea, la única versión cantada por chicas de "Suzy is a headbanger" que me gusta es la de Shonen Knife (porque la combinación del bubblegum japonés y el absoluto respeto y admiración de esas minas a los Ramones es una combinación irresistible), pero cuando vamos con canciones que pretenden "cosas complejas", creo que las damas nos tienen el horno :)

Anónimo dijo...

Bleh, se me pasó en el post y no hay manera de editar, así que agrego acá.

Versión de Stina de "Came so far for beauty -> http://www.youtube.com/watch?v=dUkvHOn0nak

Y ya que nombré "Suzy", la otra vez encontré una de esas cosas mágicas que Youtube tiene cada tanto -> http://www.youtube.com/watch?v=qoP3qFp0apQ

Marcelo Jelen dijo...

volviste a decir lo del teatro de verano.
maldito bastardo.

Anónimo dijo...

Enorme disco "Street Hassle", aunque me sumo a quien apunta "The Blue Mask" como un favorito. En mi caso, agrego "Legendery Hearts", disco que muchos consideran lisa y llanamente basura. Tal vez es mi devoción hacia Robert Quine, no sé. Igualmente, considero que esa banda era genial: Quine y Reed armaban una pared de riffs, atonalidad, jazz y ruido, y los apuntes melódicos quedaban a cargo del profundo bajo de Fernando Saunders.
Como contra, el disco en vivo, "Live in Italy", es un bodoque intragable: la misma banda que en estudio se mostraba llena de recursos ante cada canción, ejecuta todo en clave garagera, la voz de Reed no se molesta en insinuar un solo atisbo melódico en todo el disco y de esa forma no se distingue "Sister Ray" de "Walk on the wild side".
La primer mitad de "Magic and loss" es insuperable. Después de "Coal black sea" (¿se llama así?) el disco se desbarranca, pero a quién le importa a esa altura.

RT

Anónimo dijo...

Hay una canción de anathema que dice:
"Solitude was never.. never seen as loneliness
And things need.. they need time
And time leads to other things
And playing roles
Which are limited
By the poor fund of knowledge
In this sick, sick world
We all fall down
Once in a while
Escaping the law of the unexplained pains"

Eso.

El autor dijo...

Soy un gigante fan y admirador de Cash.

Desde lo musical de todas sus épocas ya que por suerte cuento con sus canciones en formatos diversísimos; pero también desde otro lugar que no se como denominar.

Si te digo que siento como que lo conozco soy un pelotudo; pero bueno, capáz soy un pelotudo.

Pero es alguien que me interesó mucho, siempre, y que entonces me dediqué a conocer. Leyéndolo (su autobiografía, por ejemplo, algo que recomiendo abiertamente y que cada vez que abro me arranca lágrimas y carcajadas, como storyteller, como hombre hablando, como testimonio de la vida, manifiesta; es salado), viéndolo recorriendo su vida en documentales, artículos, opiniones de amigos suyos, allegados, familiares, detractores (si, hay algunos), etc.

Yo te juro que el tipo, y su música, me hacen bien. Por eso lo celebro. Porque es eso, yo a Cash no lo idolatro, lo celebro.

Más allá de lo musical, insisto. No se bien qué es, y ya renuncié a intentar averiguarlo. Será su mística. Será que a ese lugar que me gustaría volver más seguido es sólo en su voz o su vieja Martin que puedo volver a volver y sentirme como en casa. Home.

Nada, Benito. Siempre que te cruzo en algún bar te agradezco por la forma que combinás las palabras; generalmente desde lo racional.

Hoy, desde lo emocional, desde el alma, y por el rato escuchando al J.R. de la guitarra y leyendo tus palabras acerca de él, y más allá de cosas que pueda estar de acuerdo o no, te vuelvo a agradecer.

Esas otras cosas ya las discutiremos cuando nos crucemos, como siempre, alguna noche, y te vuelva a abordar con el temita del blog.

Abrazo.

Anónimo dijo...

Que extraño que no conocieras esta cancion, es increible y creo que es el mejor videoclip que vi en años,igual me parece sos muy duro con el paquete de Treznor (por este deporte popular indie de pegarle a las figuras cercanas al mainstream) ha demostardo en tres canciones o cuatro, es cierto no mas, que a veces puede ser un gran compositor, yo creo que con mucha suerte eso si o algun buen viaje de por medio ¿quien sabe? pero tiene otros temas muy buenos del primer cd creo...¿alguien los recuerda?
Y extraño tambien la alabanza del idioma ingles (ya que para grandes filosofoso y linguistas es considerada un lengua para el comercio de fariseos, casi una lengua de monosilabos que rayan la barbarie) sin embargo quizas por ese mismo "defecto" adivino (y aca concuerdo) la virtud de esta lengua de estar visceralmente mas cerca del sentimiento a comunicar--¿sera una lengua mas romantica en el peor sentido del termino? es decir; ¿estara mas cerca del expresionismo linguistico?


Arturo Bandini.


saludos.

Anónimo dijo...

pd: lo que seguro es que Reznor aunque viva 200 años mas; nunca podría agregarle ni la mitad del dramatismo y la exquisitez que le agrego Cash a esa cancion.


A.B.

i´m_not_here dijo...

a proposito de la musica, ya que estoy por aqui comento que estuve en el recital de radiohead en buenos aires y fue descomunal, impresionante, mucho mas de lo que uno se puede imaginar. los tipos estan a años luz de la mayoria de las bandas y thom en vivo es El cantante...todavia sigo en el estado que nos dejó el recital, unos dias después

Carlos dijo...

Dale color, jotace.

ximena dijo...

Benito, te confieso que leo tus posts en busca de grupos que no conzco, películas que no ví, libros que no leí y que pueden ser interesantes. Esta vez, aparte de todo eso encontré un post muy emotivo, y más personal que el general. Fue un placer.
Ojalá la vida, o quién sea, te de la segunda oportunidad que pedís para Cash. A mí me está diciendo que antes de dormir voy a leer a Pessoa. Muchas gracias.

renata dijo...

La canción original me parece espantosa, nunca me gustó NIN, y Johnny Cash es increíble, esta versión de Hurt entra sin dudas entre las mejores que interpretó.
De todas maneras, ese comentario es sólo para decir que estoy de acuerdo, y es al pedo.

Lo que realmente me interesa decirte, (a vos, no me importa si se publica en realidad) es que es hermoso encontrar análisis literarios interesantes, contextualizados, completos, complejos, porque no sólo vas al texto sino a la música, a su escritor, intérpretes y sus vidas y escenarios personales, y ver el interés que suscitan en los lectores del blog.
Para este mundo que no sólo se desinteresa cada vez más en el pensar y el pensamiento sino que considera locos, estresados (sí, me han dicho muchas veces 'si seguís preocupándote así te vas a morir joven' como si eso fuera cierto o incluso tuviera algo que ver), insoportables, o directamente aliens a los que sí disfrutamos de leer cosas como estas o tener discusiones así con nuestros amigos, es muy preciado encontrar estas cosas por ahí. Y por eso tu blog es pan caliente, porque todavía estamos los que queremos pensar, hablar, analizar, debatir... Yo que sé, soy pendeja y me entristece ver morir al ágora, que la gente no quiera discutir de NADA para no pelearse. Y este blog es una bomba.

salú.

Anónimo dijo...

La visión de Johnny Cash como un viejo chocho manejado por Rick Rubin parece surgida de alguien que cree que por haber hecho un proyecto comercial el artista pierde todas sus credenciales y se arrastra bien en el fondo. Y por otra parte, Marilyn Manson no es música industrial. El texto da a entender que a tu criterio la única música industrial buena era la que vos descubriste, la más rara, la anterior a los grupos más o menos populares como NIN o Ministry. Si escuchaste esos grupos, verás que lo de Manson tiene poca cosa de industrial.

benito dijo...

Arturo: Supongo que es más fácil apreciar una lengua que no es la nuestra, pero siempre me han extrañado las carencias emocionales del español, teniendo en cuenta lo frondoso del mismo, y lo complicado del sonido de algunas palabras esenciales. Aunque para putear es insuperable.

I'm not: Este... no soy precisamente fan de Radiohead, y lo poco que me gusta de esa banda quejona es precisamente lo que no tiene nada que ver con Yorke. Así que no puedo sentir mucha empatía.

Anónimo: considerar al Cash de los American Recordings como un "viejo chocho" es, además de una demostración de tener una poronga en la oreja, una prueba de desconocimiento absoluto acerca de la vida de este tipo que se murió totalmente lúcido, como sabe cualquiera que se haya molestado en leer al respecto.

Pero lo que parece haberte molestado es el poco aprecio que le tengo a NIN. Bueno, qué le vamos a hacer, dejé los 16 años hace mucho, mucho tiempo. Y la pedanteada de decir "Marilyn Manson" no es industrial contásela a los cientos de clasificadores que lo ponen abajo de esa etiqueta. Para mí es totalmente representativo de la música industrial yanqui de 2ª o 3ª generación, es decir, la que como NIN, Ministry, Pigface, M. Manson y otros tomaron algunos de sus referentes visuales y tímbricos y la convirtieron en una especie de heavy metal con toques tecno. Y a eso le dicen industrial; para mí es otra cosa (¿heavy metal tecno?), pero para el resto del mundo no, y como me gusta comunicarme también le digo "industrial". Pero ya que estoy abro el paraguas y coincido: sí, para mí la única música industrial buena -más allá de que me gusten algunos temas de Ministry o algunos videos de Manson- es la de la primera generación, la que arranca con Throbbing Gristle y termina, supongo, con Skinny Puppy. Pero algún heredero moderno (Der Blutharsch, Deutsch Nepal) todavía queda.

Nico Peruzzo dijo...

Ya que estamos hablando de Manson, vos decís "lo de Reznor es realmente malo incluso en comparación con industriales semi-domesticados como Ministry o Marylin Manson".
Bueno, los dos grandes discos de Manson son indudablemente el EP "smells like Children" y "Antichrist Superstar", ambos producidos y con muchos temas tocados y co-escritos por Trent Reznor.
Antichrist es practicamente un disco suyo...

Creo que lo que molesto a muchos de tu post es que practicamente comparas a NIN con bandas teen mierdosas sin talento tipo My Chemical Romance o Tokio Hotel. Bandas que solo apelan a estereotipos berretas para atraer adolescentes depresivos que se visten de negro.

Además de sus 8 discos con Nine Inch Nails y haber producido a Manson, ha colaborado con David Bowie, con Janes Addiction, ha hecho el soundtrack del videogame Quake, produjo dos bandas sonoras espectaculares: la de Natural Born killers y especialmente la de Lost Highway de David Lynch.
Encuentro difícil de creer que un tipo como David Lynch le haya dado la libertad creativa que le dio -según la nota que ambos dieron a Rolling Stone en 1997- a un vampiro puto de poco talento.

Si no te gusta como escribe Reznor, o crees que NIN esta sobrevalorada, esta bien. Pero es innegable que The Downward Spiral esta en todas las listas con los mejores discos de la década del 90.
Han pasado 15 años desde su edición, y sigue manteniendo su prestigio.
¿Estaremos todos tan equivocados?

Lo que si considero una discusión de pendejos de 16 años es comparar a Trent Reznor con Johnny Cash desde cualquier punto de vista (como interprete, como compositor, como showman).
A los 16 me peleaba con mi amigo punk, y yo le decia que Led Zeppelin era mejor que Los Ramones.
Esto es lo mismo.
Si, Cash es enorme. Y su versión es mil veces más emocionante que la de Reznor -algo que él mismo admite-. Pero de ahí a hacer comparaciones más amplias entre ellos es tan estupido como comparar a Frank Sinatra con Sid Vicious solo porque los dos cantaron "My Way".

benito dijo...

nico: sigo sin entender para qué molestarse en entrar a esta página, leer un post tan largo y seguir las discusiones si te parece que están construidas encima de una premisa estúpida. Y si se va a leer tan mal lo escrito: yo no comparé en ningún momento las carreras de Reznor y de Cash porque es comparar avestruces con búfalos, naranjas con eucaliptus o vestidos con motocicletas, por Dios. Pero hay un punto en común entre ambos y es la versión de 'Hurt' que me dio ganas de escribir al respecto -aunque hay que leer en forma muy limitada para pensar de que de lo que yo quería escribir era de música-; mi desinterés o hasta desprecio por el trabajo de Reznor no viene, y me da rabia que me forreen como si yo estuviera apoyado en eso, de mi gusto por Cash o por Zitarrosa, sino simplemente de mi gusto por la música industrial, por los días y días que me pasé escuchando a Death in June, Whitehouse, SPK o, por qué no, otros visitantes del lado oscuro como Big Black o Chrome. Pero de lo que me interesaba hablar era de la transformación de una mala canción en una canción magnífica, algo que no creo que pase muy seguido.

Si alguien difiere conmigo en relación a su valoración de NIN, me parece bárbaro; en términos artísticos todas las opiniones valen en un principio lo mismo y luego se fundamentan o no. Pero -sin querer ser yo el que forreé- si me voy a guiar por algún tipo de democracia o de consenso, estoy en el horno. A mí no me pagan por ser justo. De hecho, no me pagan.

No sólo Lynch le dio su aval a Reznor, también Bowie y, me parece estúpido aclararlo, el propio Cash. Pero como muchos milagros de época, hoy en día suena tan datado como un disco de Gentle Giant, de Soup Dragons o de Dee-lite, y en su momento también fueron artistas señeros e indicadores de tendencias. ¿Qué tal vez sea un proyecto más grande e influyente? Puede ser, pero para mí sigue sin ser suficiente: para mí Queen sigue siendo una banda horrible, Kiss una de las peores bandas de hard-rock de los 70 y Radiohead un grupo tan interesante como mirar a un lechón embalsamado. Si me pongo a discutir de gustos en mi puto blog repito, estoy en el horno.

Y ni siquiera quiero forrear a los tipos de 16 años, de hecho es la edad que tiene mi sobrino, que posiblemente sea una persona más inteligente y generosa que yo. Pero si me pongo a tratar de sentir o ver las cosas como él, también estoy en el horno.

Por último, no, no sería estúpido ni sería un disparate comparar las versiones de 'My Way' de Sinatra y Vicious -que de hecho son más similares de lo que se cree-, pero sería también algo muy distinto, ya que se trata de dos interpretaciones y ninguna de ellas de su autor original, Paul Anka.

Anónimo dijo...

¿cayo queen en la volteada? puede gustar o no pero tiene unos 20 temazos no se que banda puede decir lo mismo (componian los 4 Deacon tienen temas muy buenos)Kiss estamos de acuerdo mas alla de dinastia (esa mezcla comercial de disco y heavy) pero queen es otro nivel que kiss o NIN aunque ya no los escuche.Tambien te parece choto doors no? me parece que a veces se mezcla el odio a la sobredimension mediatica/historica con la calidad y creo,que una cosa no quiere decir la otra, puede haber sobredimension pero con un fondo de calidad.Igual gustos son gustos,y cualquier gusto es respetable en cuanto a la importancia de las diferencias subjetivas de cada persona pero hay una cuestion snobista y hasta cierto regodeo en el fango melancolico en tus juicios de valor que hace ruido a la inteligencia del que te lee y te sabe inteligente.

No pretende ser mala leche esto aunque pudiera parecerlo.

Saludos.
Gregorio Samsa.

Nico Peruzzo dijo...

Es cierto, no pasa seguido que una mala canción sea versionada y transformada en una buena.
Se me ocurre el ejemplo de It´s alright, una canción bastante fea de la peor etapa de Black Sabbath/Ozzy incluida en "Technical Ecstasy" que fue bellamente reinterpretada por GNR.
Nirvana solía tomar canciones raras y experimentales de bandas indies y transformarlas en temas muy superiores.
Pero para terminar con el asunto, no considero que Hurt entre en esta categoría pues creo que la versión de NIN -si bien no es tan buena como la de Cash- es una gran canción.

Respecto a las otras bandas de las que hablas en tu última entrada, es demasiado halagador de tu parte decir que Kiss es una banda de Rock. Pero admito que a veces son un divertido placer culposo para escuchar a todo volumen y matar algunas neuronas que te anden sobrando.
El jueves vi a Radiohead, y fue uno de los conciertos más hermosos a los que he asistido, así que ahí no coincidimos.

Pero lo que me motivo a escribir esto es mi inmensa sorpresa al enterarme que no te gusta Queen.
Eso rompe mi teoría de que Queen es la única banda de rock que no tiene detractores...
Queen es igualmente admirada por rockeros clásicos y modernos, metaleros amantes del virtuosismo, por mi tío abuelo que no escucha música, por un aficionado a la opera, o por una colegiala de 13 años...

Rod dijo...

Será una casualidad que un post sobre interpretaciones de canciones se haya terminado nombrando a Paul Anka ?

http://www.youtube.com/watch?v=TsS811o21-k

No solo es una versión buenísima, sino que hace arder de furia a los fantards de Nirvana lo cual siempre encontré extraordinariamente divertido.

No es el mejor cover del disco (creo que le doy ese honor a Black Hole Sun que originalmente era horrible), pero igual tiene extra puntos por meterse con una vaca sagrada.

En general cuando alguien agarra un "mega clásico" y lo hace paté, siempre me resulta interesante al menos de arranque, tipo esa versión de "Smells Like Teen Spirit", el "My Way" de Vicious, el "Light My Fire" de Mike Flowers Pop y otras del estilo.

Me dan ganas de nombrar también la versión de Tanaka Rie (como Minna-Dietlinde Wilcke en "Strike Witches") de Lili Marlene, pero más allá del cambio de idioma, es una versión tan respetuosa que realmente no cuenta :)

kristo eleniak dijo...

Me parece que la discusión se fue orientando hacia lugares poco interesantes. Digo, creo que a la larga se torna un tanto aburrido comparar gustos y alarmarnos ante las diferencias.
El post tenía un costado muy fuerte cuando se refería al efecto que produjo hurt en Benito.
De como una canción se filtra a traves de nuestras defensas y despierta el horror o la maravilla.

Agustin Acevedo Kanopa dijo...

Pienso en que el tremendo fracaso que implica el éxito en parecerse mucho a la imagen que elegimos cuando teníamos distintas necesidades.
Me voy a sentar porque me viene un poco de vértigo.
Ya te lo había comentado la otra vez, pero esa hemorragia en cursiva que cercena el post en dos es algo que me ha quedado resonando en estos días.
Con respecto al idioma inglés, tras un desencanto inicial, cada vez me doy cuenta de que hay cosas que solo puedo decirlas en ese idioma.
Me doy cuenta de que ya no puedo hablar de sexo sin mencionar alguna palabra como blowjob, cowgirl y cosas asi. Quizas su caracter analitico nos da mas tranquilidad

De yapa:
Este inenarrable cover(?) de Heroin/Gloria hecho por Billy Idol:
Acá
The horror... the horror

i´m_not_here dijo...

ta todo bien que no te guste radiohead o la banda que sea, pero considerarlos un grupo de quejosos me parece por lo menos errado. incluso no incluiría ese adjetivo para radiohead. pero en fin
si estoy de acuerdo en cuanto a kiss, creo que fuiste muy generoso incluso al considerarlos no ya una banda de rock, sino una banda de algo.

Walter Hego dijo...

Aaah, es que hablar mal de una banda que le gusta a toda la familia tiene ese je ne sais quoi.

Y aunque je ne sais tampoco qué lugar ocupo yo dentro del núcleo básico de la sociedá, lo cierto es que no soy una oveja negra y a mí también me gusta Queen.


Thunderbolts and lightning
Very very frightening me
Galileo, Galileo ...

mvc dijo...

Me estoy riendo hace 4 horas con el tipo que dijo que se le rompió la teoria de que "Queen es la única banda de rock que no tiene detractores". Man, bienvenido a LA REALIDAD. Y te lo digo como fan de Queen. Ser fan de Queen es darle una excusa a gran parte de la población mundial para usarte de hazmerreir y objeto de burlas por el resto de la eternidad. !Te lo digo por experiencia propia!. Esto es una muestra de como pensar que uno y su entorno es un muestro representativo del resto del universo conduce a teorias disparatadas.

timon dijo...

Te vengo siguiendo hace un par de años e incluso e recomendado artículos. Cosas como Melvins o J. Lizard o Boredoms o Burroughs o Selby jr. las conocí por usted.
Sobre el tema. NIN a mi si me gusta, los fuí a ver las dos veces que vinieron a Buenos Aires. Buenos shows.
El tema Hurt me gustó al principio, cuando recien conocía The Downward Spiral, pero con el tiempo se me hizo la impresión de ser un tema "sonzo". El viejo Cash y la inteligencia le dieron una buena vuelta de tuerca. Y ahí si que me gustó.
Reznor, a mi parecer, tiene su puntito alto con The Fragile o algo de Ghost I-IV.
El tambien tiene algo que ver con la desgraciada vertiente del nu metal. Casi los mismos defectos que señalás.


Pd: puta madre, se murió Alfonsin. Todo lo malo y lo bueno, pero no era el Carlo, ni los otros bastardos.
Espero que alguien se acuerde del discurso improvisado del viejo en Washington frente al buitre de R. Reagan. ¿Alguna vez alguien hizo eso?.

no dijo...

perdon por no elevar el nivel de los últimos posts, sino más bien, bajarlo aun más. pero yo en cambio estoy sorprendido de encontrar a alguien al que le guste queen. pensé que era una especie quie se había extinguido en 1986.
vuelvo a disculpalrme...

El autor dijo...

Radiohead llora a cara de perro.

benito dijo...

Gregorio: tuve siempre una relación de amor-odio con The Doors. Cuando era pendejo hice esfuerzos enormes porque me gustaran, porque suponía que eran la banda ideal para mí, pero no hubo caso. Pero ahora, de grande, me reconcilié bastante con ellos y tienen cosas que me gustan mucho. Me parecen una banda muy sobrevalorada, pero eso no quiere decir que sean una mala banda.

Con Queen o Kiss me resulta casi imposible, salvando por supuesto algunos temas aislados.

kristo: por supuesto que el post no era un post de crítica musical, sino de reacciones hiper-subjetivas.

Agustín: tu copy & paste me permitió descubrir que en esa frase que te gustó había una conjunción residual, un "que", vestigio de un mal corte en la redacción y que dejaba la frase tambaleando en lo gramatical. Ahora la corregí, dice lo mismo pero con mejor forma.

La frase es mía, y es algo en lo que creo profundamente, pero es un concepto -la elección de máscaras y el cambio de opinión- sobre lo que han trabajado con muchísimo más talento gente como Fernando Pessoa en 'Tabaquería' o David Byrne en 'Seen and not seen'. Obviamente ese es el sector del post más personal y en cierta forma sensible. Últimamente estoy muy inclinado hacia el autoexamen sensible, lo cual, por supuesto, carece de interés para cualquiera que no sea yo.

timon: acabo de subir un largo post que escribí de un tirón por cosas que me detonó la muerte de Alfonsín. No tengo mucho más que decir que eso.

Anónimo dijo...

...que tema interesante el de los covers, yo creo que lo mejor a la hora de encararlos par ano hacer el ridiculo es como minimo respetar al menos la linea melodica, al menos no va a ser un desastre total recuerdo siempre en el homenaje a Lennon que Lou Reed hizo mierda "Jelaous guy", no se reconocia ni la linea melodica es mas parecia que lo estaba cargando de resentido a Lennon por no poder llegarle ni a los talones en talento.Es muy dificil superar el original pero puede darse como en el ej del blog lo que hizo Cash con un tema bueno pero uno mas, es increible, recuerdo buenas versiones por ej la de Bowie que coverea en el antologico umplugged Cobain en realidad esta buena pero esta basada en la de los mnat puppets, y lo mismo con la cancion cristiana que hacian los Vaselines,otra version genial es "love buzz" del grupo sueco pero donde hace algo extraordinario(tanto que se merecería un posteo similar a este)es en la cancion de LEadbelly,para mi supera la original y tambien es una de esas performance unica teniendo a su favor que casi no hay ayuda desde los arreglos.Creo que en el caso de Cobain el tema de coverear juega el papel de divulgacion u/o homenaje (como jesus lizard con el temazo de Dicks)siempre es enriquecedor y gratificante cuando un artista hace justicia y saca del olvido grandes perlas del fondo del mar.
hay qu etener gran inteligencia para utilizar el recurso del cover asi como te puede ayudar te puede hundir.El unico cover que quise hacer es "Devil town" de Daniel Johnston me estab matando para pasarlo a castellano y me entere que los punsettes lo hicieron primero.

G.Samsa.

Anónimo dijo...

pd; repasando los covere de cobain recuerdo tambien la version de D/7 o la muy buena version de Turnaround tambien y me doy cuenta que el papel de divulgador y homenajeador justiciero fueron importantes, ya que sacó a la luz cantidad de joyas perdidas en el undergornud; de ahi que me moleste tanto el desprecio snobista actual de parte de cierta parte del indie para con la figura de Cobain porque cometió el pecado de hacerse popular...encima varios siguen haciendo giras o choreando gracias a el.


Saludos muy buen posteo.


Gregorio Samsa.